
El arte bizantino se originó a partir del siglo VI como continuador del arte paleocristiano oriental y nace como confluencia de los estilos griegos, helenísticos, romanos y orientales.
En la arquitectura usaron ladrillo y piedra para los revestimientos exteriores y mosaicos en los interiores. Además emplearon arquerías de medio punto, columnas clásicas como soporte, etc.
Su aportación más importante fue el empleo sistemático de la cubierta abovedada, especialmente la cúpula sobre pechinas
Otra aportación de gran transcendencia fue la decoración de capiteles.
El gusto por la riqueza y la suntuosidad ornamental exigía el revestimiento de los muros de sus templos con mosaicos, no sólo para ocultar la pobreza de los materiales usados, sino también como un medio de expresar la religión y el carácter semidivino del poder imperial ya qu era un arte eminentemente áulico (perteneciente a la corte o palacio)
Desaparece la figura humana, se convierten en arquetípos, figuras alejadas de la realidad visual, por miedo a caer en la idolatría, ya que en este periodo existieron muchos conflictos y por ello tampoco se permitían las estatuas en los templos. Sin embargo, la imagen de Dios y de los santos fueron el centro de las decoraciones murales y los marfiles.
La función del arte bizantino era elevar la mente hacia el plano de lo divino. A través de la contemplación física de la grandeza y de la belleza artísticas, el hombre adivinaba la omnipotencia de dios.
Los métodos que usaban tenían una mezcla de lo sofisticado y lo primitivo pues muestra rigidez y técnica a la vez. Las sombras y claroscuros apenas existen.
CLAUDIA GUERRA.
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